La comida de cine, desde la llegada de las grandes cadenas, ha sido siempre una de consumo rápido, con mucha azúcar y poco valor agregado.
Cuando los grandes complejos multisala aterrizaron en el país los tradicionales huevos de almendra caramelizados y las naranjitas cubiertas de chocolate cedieron paso a las cabritas dulces y saladas y las bebidas de tamaño XL.
Y durante años, ese fue el estándar, uno que se mantuvo hasta la llegada de un nuevo concepto, las Salas Prime.
::: El Lugar :::
El más reciente cine de la capital, CinePlanet Costanera Center, inauguró hace poco sus dos salas top. Ubicado en el último piso del Mall Costanera Center, estas salas entregan una experiencia completamente diferente al momento de disfrutar una película.
Acá la idea es que no sólo la sala (donde las butacas son cómodos sofás tipo avión completamente reclinables) sea parte de la experiencia de ver una película, si no que esta empieza antes, al llegar al acogedor lobby del lugar, donde se puede esperar sin problemas ni incomodidades a que empiece la función.
La mayor diferencia viene al momento de querer comer en el cine, donde este lugar entrega una oferta superior.
::: Para Compatir :::
La carta es acotada, pensada principalmente en finger food y recetas que se puedan comer sin mayores problemas con poca luz.
Partimos probando un sorprendente mix de tragos analcohólicos, con un refrescante mojito, una untuosa Piña Colada, dos cócteles que se alejan de los típicos jugos tradicionales.
Partimos probando unas Borchetas Mixtas,
clásico de cóctel, bien hechas, con dos dados de pollo bastante jugoso y unos trozos de carne que cumplen.
Menos logrado fue el Carpaccio de Salmón, cortado en finas láminas, pero algo alimonado.
Y si se quiere algo más light, está la opción de pedir la Ensalada César abundante bol con generosos trozos de pechuga de pollo, crutones y escamas de queso parmesano, todo con una salsa que le da un sabor bastante nacional.
Si la idea es compartir, hay un Mix de Masas que viene ideal, con dos Pizzetas sabrosas, pero que mejorarían con más grillado, mini quiches de pollo y espinaca y tres pequeñas empanaditas de aceituna-pollo y camarón-queso.
::: Los Sándwiches :::
Más personales son los sándwiches, de los cuales probamos dos representantes.
El primero fue el Suprema de Pollo, trozo de pechuga grillada con un toque de miel y queso derretido al que se le puede añadir tapenade de aceitunas. Sabroso y bien acompañado por unas papas horneadas.
El segundo fue un Roast Beef con lechuga hidropónica y tomate, contundente mezcla que necesita un poco de salsa o de mostaza para unir los sabores.
De postre, pedimos una buena porción de Cheescake y otra de Tiramisú, recetas que cumplen con dar un final dulce a esta experiencia.
::: Conclusión :::
La gastronomía de Costanera Prime es simple y sin pretensiones. Cumple con dar un servicio diferente y más elaborado a un público que entiende que ir al cine es mucho más que ver una película.
En ese sentido, una carta correcta. Un espacio agradable y bien decorado y una sala realmente cómoda hacen que ir la cine ahora sea una experiencia completamente nueva.
Texto: Darío Córdova
Fotografías: Alejandro Mery
